Galletas de regalo de cumpleaños.

Hace poco mi hija Paula ha tenido un aluvión de cumpleaños... La verdad es que las madres como siempre en un intento de facilitar a nuestras amigas la vida, nos dijeron que no había que llevar ningún regalo. Pero Paula que ya sabe leer perfectamente (¡¡¡con cinco años recién cumplidos!!! Es el orgullo de mamá) me dijo : " Mami, si no le llevamos regalo tendremos que decorar unas galletas..."
Y nos pusimos manos a la obra:

Cuando decoro galletas con Paula me parece más sencillo hacerlo con fondant (aunque tengo que reconocer que cada día mejora con la manga de glaseado de azúcar).
Paula quiso preguntarle a su amiga Isa cuál era su color preferido... el ROSA, ¡por supuesto!. Lo combinamos con el color amarillo para que contrastara, que teñimos con colorantes americolor (este paso a mis hijos les encanta porque es como amasar plastilina).

Luego sólo tuvimos que elegir los cortadores con expulsor que más nos gustaban y las letras del nombre de la cumpleañera.

Una vez terminado lo metimos en su cajita y lo protegimos con unas servilletas... Cuando decoramos la caja utilizamos los últimos sellos que compramos en Sal y Pimienta en la feria DIY.

A Paula le encantó llevarle a Isa este regalo... y por lo que me ha dicho su madre Isa también está encantada terminando sus últimas galletas de cumpleaños.

Esta entrada participa en el mercadillo creativo de Creative mindly

Desafío love craft junio : Banderines.

¡Cómo me gustan los banderines! Cuando leí el tema de este Desafío Love Craft pensé que era la gran oportunidad que estaba esperando para lanzarme.

Tenía pendiente hacerles a mis hijos un calendario de logros para motivarles a realizar las actividades de estos días de pre-vacaciones. Así que me pareció una idea estupenda juntar mis dos tareas: el banderín y el calendario de logros en una sóla. Tal y como tengo previsto, les daremos un gomet o pegatina cada vez que hagan una bien, y cuando completen su cuadro llegará el premio en forma de BANDERÍN.

¡He recurrido a mi Silhouette Cameo!. Ya la he utilizado para hacer La Casita del Ratón Pérez, y unas cuantas cosas más que os iré enseñando, pero siempre con vinilo. Esta vez he usado otro material, mucho más sencillo y económico, los papeles de cartulina decorados. Las cartulinas las compré en un kit de papeles para Scrapbooking y con la Silhouette, troquelé el cartelito con el día para cada bolsita.

Corté unas bolsitas Craft que compré en Delipapel hace tiempo y las tenía reservadas para algún packaging de emergencia.  Puse washi tape en la base. ¿A alguien le suena el washi que he usado?

Perforé con una troqueladora de flor las bolsas, hice cuatro agujeros: dos para cerrarla con baker twine y otros dos para meterle el lazo del banderín. Dentro de las bolsitas he colocado el premio: un mini-huevito kinder y un chicle sin azúcar (para compensar).

Después de pasar una cinta de raso... ya tengo los dos banderines colgados en la pared del pasillo de casa. Además de que espero cumplan con su finalidad original, me están perfumando la casa con el olor a chicle de fresa que embriaga todo el pasillo.

Empecé utilizando los banderines para decorar las fiestas: de cumpleaños de mi hermana, del bautizo de mi hija Celia y en el cumpleaños de cupcakes de mi sobrina María. Siempre me encantaba el resultado, los he guardado y los he vuelto a utilizar en varias ocasiones, e incluso los he utilizado como elemento decorativo en la habitación de mis hijos... Pero creo que este que es totalmente DIY es el que más me gusta de todos.

¡ SOS : Regalo para invitados !

Cuando celebramos la barbacoa el fin de semana pasado quería ofrecerles algún detalle especial a mis invitados para endulzarles la vuelta a casa... ¿Quizás tendría que haberme quedado yo con una! Porque me quedo cansada y con ese subidón de adrenalina que te deja recibir en casa... pero muy triste cuando acaba todo...

Compré en el último momento unos botecitos que encontré en el centro comercial de al lado de casa y en el mismo sitio unas golosinas. La chica me miraba con una cara... ¡le estaba usando cuatro bolsas diferentes para que no se me mezclaran las chuches! La verdad es que estas gominolas son un vicio...

Con las nociones aprendidas en mi último curso de Washitape en Delipapel con María (que es un súper encanto y aunque no probamos su bunt, porque no queríamos perder un minuto... Olía de muerte). Utilicé unas etiquetas que le compré a ella de papel craft y con la tinta blanca me encanta el efecto de nuestro sello familiar. 

¡Un poquito de washi-tape y de baker twine verde y ya está todo listo!

Marcadores de Sitio. DIY.

Supongo que ya habréis leído la última entrada de la bbq que tuvimos en casa el último fin de semana, sino podéis hacerlo aquí. Ahora que me he aficionado al mundo DIY procuro sacarle partido a toda la "inversión" que estoy haciendo en cualquier momento, además creo que se estimula alguna parte del cerebro que hace que se dispare tu creatividad, bueno, ¡dentro de mis límites!

Esta vez me pareció que debía empezar a hacer alguna de las cosas que había visto en Pinterest hace tiempo y  me han parecido sencillas: unos servilleteros con los nombres de los comensales... podéis ver aquí como se hacen los servilleteros en inglés o seguir leyendo cómo los he hecho yo. Hace unos días oí a Bárbara de Mi Cesta de Mimbre en la feria DIY de Madrid, que ella sólo pineaba en su tablero de manualidades pendientes cosas que no le llevaran más de 20 minutos y esta es una de las cosas que podría pinear sin problema porque puedo aseguraros que es súper rápido.

Como los cojines de mi terraza son de color naranja no podía ser otro el color elegido para que todo combine como dice Paula. Así que cogí mis papeles naranjas para hacer rápidamente los servilleteros... y puse en marcha la impresora.

Esta es la lista de cosas que he utilizado para hacerlos: 

Y aquí tenéis el paso a paso:

1. En la hoja del estampado elegido imprimís los nombres de los invitados en la fuente que más os guste en columna justificados al centro. Os recomiendo que elijáis una fuente más o menos cuadrada por lo menos la base de las letras y con las letras lo más rectas posibles (para facilitar el corte). Si elegís un color estampado como yo podéis imprimir la letra en el color que queráis para que destaque sobre el estampado, (imprimir siempre sobre el lado estampado, jejeje... siempre me equivoco.

2. Con la cizalla de corte separáis en rectángulos cada uno de los nombres.

3. Cogéis vuestra tabla de corte (la mía es ideal de Delipapel... recién estrenada) o en su defecto ponéis muchas revistas o cartones debajo para no estropear la mesa sobre la que cortéis. Y con el cutter repasamos todo el borde de las letras excepto la parte inferior de la que quedarán sujetas al marca sitio.

4. Levantad las letras doblándolas hacía delante y con la cinta de doble cara cerráis el servilletero.

Os aseguro que es rapidísimo, sólo tenéis que hacer caso a mi amiga Ana y tener un arsenal de cosas listas en casa para cualquier eventualidad... Os la recuerdo muchas veces pero cuando te metes en este mundo del DIY... ¡su recomendación empieza a cobrar verdadero sentido!

Barbacoa en casa... ¿Os apuntáis? ¡Estáis invitados!

Este fin de semana hemos estado bastante ocupados en casa: hemos tenido a la peque malita, yo he estado en un curso de tartas y ¡hasta nos ha dado tiempo a invitar a los amigos a una barbacoa!... Pero es que teníamos tantas ganas de empezar a utilizar la terraza de nuestra casa... El invierno en Madrid este año ha durado hasta el cuarenta de Mayo como dice el refrán.

Mi marido se encarga siempre de todos los preparativos de la comida y esta vez quise darle un toque diferente aportando mi punto "decorativo" como dice Paula. Y para adornar la mesa puse un centro con unas naranjas y agua... me parece que las frutas con agua aportan un frescor veraniego a cualquier fiesta y también unas velitas para ahuyentar a los mosquitos traicioneros. Y eso unido a los servilleteros - marca puestos... ¡fueron todo un éxito!.

En la última barbacoa que hicimos en casa para celebrar el cumpleaños de mi marido con amigos se nos había olvidado comprar pan y para resarcirme compré diversos panes en una panadería nueva que han abierto al lado de casa: de aceitunas, de aceite, de pipas de girasol,... La verdad es que las cestas de pan fueron todo un éxito.

En total fueron tres detalles que no me llevaron más de 45 minutos y todos apreciaron el cambio... ¡La comida estupenda como siempre gracias al súper chef que tengo en casa!

 

Y para despedir a mis invitados y darles las gracias por su maravillosa compañía, les dimos una botellita de chuches que, ¡esperamos les endulzara a todos el regreso a casa!

¡Mil gracias a mis profes!

Ahora que se acercan los últimos días del curso me entran ganas de preparar un detallito para las profesoras de mis hijos... la verdad es que no podíamos haber tenido más suerte con ellas. Hemos pasado un curso genial y nos han ayudado muchísimo a mejorar la educación de nuestros peques... Por si algún día leéis este blog:  ¡Millones de gracias Belén y María Jesús! ¡Thank you: Miss Cristina, Miss Pilar, Miss Ana!

Para las profes de inglés y para las dos secretarias del colegio que me reciben siempre, siempre y siempre con una sonrisa y una palabra cariñosa ... decidí hacerles unas galletas con todo el cariño para desearles un verano estupendo. Como me había gustado mucho el resultado del macetero de Marcos (el hijo de mi mejor amiga) decidí no improvisar.

Esta vez los tonos elegidos han sido los tonos morados ya que tenía todo gracias a Beatriz de Coleccionando Cosas Bonitas y al Swap de La Casita del Lago. Utilicé los washi tape morados que me regaló Bea y unas etiquetas de colorines que compré en Tiger... Esta vez en lugar de papel de seda con unas servilletas moradas de Ikea forré el corcho de pinchar flores.

Las galletas de bailarinas las hicimos utilizando el molde de sirenita de Muy Dulce Vinuesa... Mi madre y mi hermana habían ido a un curso hace poco y ¡¡¡ yo me sigo muriendo de ganas de hacer uno!!! Me parece un  motivo ideal para recibir el verano.

¡Espero que les guste! Mi madre, mi hija Paula y yo lo hemos hecho con toda la ilusión del mundo... Hasta la abuela Marta ha colaborado yendo a Ikea a comprar un macetero en el último momento. ¡Muchas gracias a todas!

¡Cómo nos gustan las comuniones!

Ha sido uno de nuestros primeros encargos... al principio la mamá de Iciar pensaba que no tendría tiempo para montar la mesa de dulces de la comunión de Ichi, pero sacó el tiempo de donde pudo (como hacemos todas las madres en estos momentos tan especiales), se pidió un par de días libres en el trabajo y organizó un candy bar súper especial para su pequeña.

Nosotras somos amigas de la mamá de Iciar y ella ya conocía nuestras galletas y tartas. Así que ha sido un verdadero placer colaborar con ella en el diseño ( a Ichi le encantan los colores vivos y por eso su mamá decidió que le encantaría la tarta decorada con flores de colores) y crear una tarta de comunión inspirada en los imprimibles de Julia.

La tarta era de chocolate y el relleno con más chocolate (ya nos hemos hecho con el libro de Alma para Ipad) y la verdad es que por lo que nos dijeron la receta triunfó entre los más pequeños... Horneamos las distintas capas del bizcocho y lo metimos con el ganaché de chocolate en la nevera siguiendo los cosejos de Alma. Tenéis que perdonarme pero acabamos la tarta de comunión a las tantas de la madrugada y por eso las fotos no tienen buena luz... ¡Ya sabéis es la ley de Murphy, cuando tienes un encargo se ponen malos tus hijos o tú misma!

Las galletas fueron de papel comestible y como podéis adivinar Ichi es una monísima niña rubia con media melena, estaba todo personalizado... Las embolsamos para que pudieran darlas como regalo de comunión y además le preparamos una cestita de frutas para presentarla en la mesa de dulces.

Nosotras quisimos regalarle unas letras decoupage en colores rosas que nos encantan (podéis ver cómo hacerlas en la entrada del cumpleaños de bailarinas). A Ichi le encantó la sorpresa y su mamá nos ha dicho que le dio un abrazo tan tan enorme que han valido la pena todos los esfuerzos.

Ohhhh.... Coleccionando Cosas Bonitas me ha enviado mi primer Swap.

Cuando mi cuñada Ana me avisó de que ya tenía mi Swap en casa ¡quise adelantar la vuelta del puente de Mayo a Madrid!... No lo hice pero me entraron tantos nervios, ¿quién sería?, ¿qué traería?,... Y la verdad es que no podía haber tenido más suerte: Beatriz de Coleccionando Cosas Bonitas. Supongo que la conocéis todas y estáis apuntadas al Desafío Scrap que organiza ( Paula y yo, por supuesto).

Me llegaron dos cajitas repletas de cosas... La verdad es que admiro a las personas que saben administrar tan bien el espacio, no cabía nada más. ¡Y qué presentación tan bonita! Todo venía acompañado de una tarjeta hecha por ella misma en la que me decía unas preciosas palabras ¡Muchas gracias, Bea! y me explicaba dónde había comprado cada cosa.

Dentro de la cajita más pequeña había metido cositas suyas: botones preciosos, cintas de varios colores (esas no salen en la foto) y stickers de corazones y otras formas románticas que me encantan, en unos tonos preciosos que ya estoy utilizando en un montón de trabajos que voy haciendo poco a poco.

En la caja que abrí en segundo lugar había colocado cositas que compró en "Made with lof Shop" una tienda que tiene unas cosas preciosas y con las que yo estoy encantadísima: una troqueladora con forma de corazón (síiiii!!! No tenía ninguna con forma de corazón y yo sabía que era imprescindible, pero cuando iba a comprarla siempre estaban agotadas), unos washi tape en tonos lilas, baker twine en el mismo color que utilizamos para empaquetar las galletas de cumpleaños de mi hermana Malena, un lápiz - portaminas que escribe fenomenal, un sello y tinta lila.... ¡Me encanta este color!

Muchas gracias Bea, me ha encantado el súper regalo que me hiciste y ya estoy deseando participar en el próximo Swap... ¡Porfi si os enteráis de otro avisadme en los comentarios!

Vino el Ratón Pérez y se lo llevó...

Hemos pasado unos días en tensión porque a Paula comenzó a movérsele su primer diente. Es pronto porque tiene cinco años recién cumplidos, pero hace un par de meses se clavó un tenedor y eso ha acelerado el proceso...
¡Ha sido la primera de su clase en perder un diente y estaban todos encantados mirando su dientecito en su cofre! Cuando llegó a casa nos pusimos a trabajar para prepararle el camino al ratón... Sí, puedo deciros que finalmente abrí mi Silhouette.

Paula me ayudó en todo el proceso: elección del modelo, quitarle las zonas que sobraban, ponerle el papel de transferencia y ¡elegir el sitio dónde colocarlo!

Pobrecita qué nerviosa estaba esperando al Ratón Pérez... le preparó una carta en la que le explicaba lo bien que se cepillaba los dientes y la envolvió con un lazo y un trocito de queso. El ratón Pérez le dejó unas moneditas con las que se ha comprado un kit precioso de Scrapbooking en Pórtico (creo que estoy creando un pequeño monstruo... jejeje).